Abogados de accidentes en plantas y refinerías
Luchando por los perjudicados por explosiones e incendios en Texas, Luisiana y todo el país
Cuando los gerentes y propietarios de las plantas no proveen a sus trabajadores lesionados de lo que necesitan para mantenerse, Arnold & Itkin los hace responsables. Nuestros abogados de accidentes en plantas y refinerías han ganado más de 20 mil millones de dólares para nuestros clientes, incluyendo resultados récord para las víctimas de las mayores explosiones de plantas en el país. Hemos ayudado a trabajadores de plantas de todo el país a conseguir justicia y seguridad de por vida, independientemente de la gravedad de sus lesiones. Desde Dallas a Baytown, desde Baton Rouge a El Paso, hemos estado allí para nuestros clientes.
Hemos representado a víctimas de accidentes en plantas que tienen que ver con:
- Plantas químicas
- Refinerías de petróleo y gas
- Accidentes de rotación
- Explosiones en plantas
- Políticas inseguras
- Maquinaria defectuosa
Puede que ni siquiera sepa lo que causó su accidente. Todo lo que sabe es que usted o un ser querido se enfrentan a lesiones que alteran su vida y a facturas médicas que no terminan y son insuperables. Ahí es donde podemos ayudar. Nuestro bufete puede luchar por usted para obtener atención médica de alta calidad, reemplazar sus ingresos perdidos y asegurarle las finanzas que necesita. Llámenos para que usted pueda concentrarse en mejorar. Podemos luchar para conseguir lo que necesita, pase lo que pase.
No importa cuán dura sea la batalla
Cuando las empresas presionan a sus empleados para que produzcan a una mayor capacidad o dejen de lado el mantenimiento necesario, los accidentes son inevitables. Nuestro bufete existe para obligar a esas empresas a ser responsables para con sus trabajadores lesionados. Nos hemos enfrentado a BP, Williams Olefins, Exxon-Mobil y a los nombres más importantes de todas las industrias. Cuanto más difícil sea el caso, mejor. No sólo nos enfrentamos a las empresas más grandes del mundo, sino que les ganamos repetidarmente. Arnold & Itkin se compromete al 100% a ganar su batalla.
No importa lo que hayas pasado
Los trabajadores en las fábricas que han sobrevivido a accidentes catastróficos suelen quedar con quemaduras graves, movilidad limitada o discapacidades de por vida. Para ellos, lo que está en juego no podría ser mayor. Este caso representa todo en su vida, así que para nosotros es así también. Por eso ponemos todo nuestro empeño para asegurarnos de que usted reciba la atención médica y las provisiones que necesita.
No importa lo grandes que sean
Cada vez que vamos a los tribunales, nos enfrentamos a docenas de abogados corporativos muy bien pagados que pasan toda su carrera defendiendo la negligencia corporativa contra gente normal como usted. No importa cuántos abogados nos envíen. Hemos podido salir airosos porque, cuando luchamos por nuestros clientes, estamos luchando por nuestras familias y nuestras comunidades. Las grandes empresas pueden amenazarlo a usted, ponerlo en una lista negra o abrumarlo con un ejército de abogados litigantes. No importa. Lucharemos en su nombre a través de todo esto.
No importa cuán grande sea la noticia
Hay una razón por la que hemos litigado en los accidentes de plantas y refinerías más infames de la historia reciente. Cuando la gente ha pasado por un accidente que les ha cambiado la vida -del tipo que aparece en los titulares- sabe que debe llamarnos. Hemos ganado veredictos y acuerdos que baten récords en casos tales como la explosión de la refinería de Texas City en 2005, la explosión de la planta de William Olefins Geismar en 2013, la explosión de la fábrica de madera contrachapada de Georgia Pacific en 2017 y muchos otros. Si estás atrapado en medio de un enorme accidente de planta, necesitas un bufete de abogados que se mantenga firme bajo la presión de la atención nacional.
Cuando aceptamos un caso, luchamos hasta ganar
Para nosotros, no existe la posibilidad de ir a medias por una víctima de un accidente de refinería. Cuando nos enfrentamos a un gigante industrial, vamos hasta el final. Pasamos innumerables horas preparando escritos, tomando declaraciones, trabajando con los investigadores y haciendo que los responsables asuman su responsabilidad por su papel en el accidente de la planta. Ningún obstáculo nos detendrá. Pase lo que pase.